Fans drohen: Niederlage oder Schuss in jedes Bein
10.11.2006
Der argentinische Fußball ist zum wiederholten Male von einem Skandal um gewalttätige Fangruppen erschüttert worden. Im Mittelpunkt steht dabei der Erstligaclub Gimnasia.
Fans des Clubs hatten den eigenen Spielern einen "Schuss in jedes Bein angedroht", falls sie das Spiel gegen die Boca Junios gewinnen sollten, berichtet die Sportzeitung Ole. "Gegen Boca müsst ihr auf jeden Fall verlieren", hätten etwa 20 der gut organisierten und besonders aggressiven Fans in den Umkleideräumen der Spieler befohlen.
Die Drohung hat ihre Wirkung offenbar nicht verfehlt, denn Gimnasia verlor das Duell mit 1:4. Grund der ungewöhnlichen Drohung der so genannten Barrabrava gegen die eigenen Spieler war laut Olé, dass eine Niederlage Bocas dem Erzfeind von Gimnasia, dem Club Estudiantes, gute Chancen auf den Titelgewinn verschafft hätte.
Verbindungen zur Polizei und Politik
Diego Maradona forderte, "irgendjemand muss etwas unternehmen oder der Staat eingreifen". Die Staatsanwaltschaft lud die Spieler von Gimnasia vor, um sie zu den Vorgängen zu befragen. Das Parlament der Provinz Buenos Aires verabschiedete unterdessen ein Gesetz, das den Barrabravas den Zugang zu den Stadien verbietet.
In den Barrabravas sind die besonders treuen und gewaltbereiten Fans organisiert, die beste Verbindungen zu den Vereinsführungen haben. Zugleich aber sind sie nach Angaben von Kennern des Fußballs bei fast allen Vereinen das Zentrum einer mafiösen Verbindung zur Polizei.
Zudem werden sie auch von Politikern für Straßenschlachten angeheuert. In den Stadien zetteln sie immer wieder brutale Schlägereien mit gegnerischen Fans und mit der Polizei an.
"Verlieret oder mir schiesse euch in d'bei"
La apretada oficial
Dos directivos participaron de la amenaza al plantel. Franco blanqueó el hecho. Y ya se armó un todos contra todos, en el que muchos jugadores se quieren ir. ¿Muñoz? Feliz.
Yo quiero saber qué piensa Muñoz, el presidente que nos paga por ganar los partidos —preguntó un jugador y miró a los dos dirigentes que estaban al lado de los barras.
—¿A vos qué te parece? Con Boca hay que perder sí o sí —respondió uno de ellos como si fuera obvio.
Los directivos, aunque suene inverosímil, no sólo acompañaron a los hinchas a Estancia Chica. Cara a cara con los jugadores habían bajado la apretada oficial. Mientras los barras mostraban las armas y uno invitaba a pelear a un defensor ("vení afuera que te quemo", amenazó "fierro" en mano), los funcionales Marcelo Leguizamón (secretario) y Mariano Berón (vocal) leyeron la palabra del Diablo. Quizá por eso, mientras el simulacro del partido se jugaba para la TV, Juan José Muñoz estaba en un programa partidario... Ya sabía cómo iba a terminar.
Los jugadores están presos de Muñoz. Y las nuevas órdenes, tras la denuncia de Olé que movilizó a todos los medios, ya no necesitan de mensaje violento. Está implícito. Por eso ayer se reunió para darles su charla técnica para jugarle a la Justicia (fue la única en estos días, porque Pedro Troglio no les dio ni siquiera una indicación táctica a sus jugadores para enfrentar al puntero). Allí, reunido con los más grandes, voceros del plantel, Muñoz pidió bocas cerradas y discurso negador de las amenazas cuando vayan a declarar por la causa que abrió el fiscal Romero.
Aunque antes se había quebrado un testigo: Franco habló por radio para decir que el martes habían tenido visitas. Algo que causó tanta furia en un experimentado del plantel, que hizo averiguaciones periodísticas para saber "por qué habló este boludo". El lateral habría soltado la lengua por temor a quedar marcado como partícipe de un papelón.
El conflicto, en un punto, se transformó en un todos contra todos. Los jugadores estaban divididos sobre qué postura tomar: algunos querían ir al frente, otros no sentían que perdían la dignidad por una derrota deliberada. Todo porque se dañaba el honor del hincha si se ayudaba al Estudiantes del Verón bueno, que hubiera quedado a un punto de Boca. Así y todo, el plantel está enfurecido con el DT que antes abrazaba para festejar los goles: por lo bajo le recriminan que "se encerró en un baño" cuando llegó la pesada a la concentración y también alguno lo acusa de que "fue el que botoneó quién estaba de cada lado". Y mucho más furiosos están con dirigentes que ya parecen barrabravas. Al punto de que se quieren ir varios jugadores —"todos", pareció exagerar una fuente— aunque sólo cinco podrían cumplir su objetivo: Goux (levantó la voz en el apriete y lo sentaron con un "callate porque te mato"), el mismo Franco (hasta el propio técnico lo dejó solo en sus ambiguas declaraciones, ese feo "pregúntenle a Franco"), Teté González, Juan Carlos Olave y Martín Cardetti (él, además, está a préstamo). Hay quienes suman a Cornejo, también a punto de terminar su vínculo, aunque al dueño del 50% de su pase le interesaría seguir teniéndolo cerca... Uno de los pocos que quiere quedarse es el DT, o que no puede irse. ¿Por? "El presidente lo tiene agarrado". Parece que le prestó buena plata cuando a Troglio lo agarró muy fuerte el corralito del 2001 y después le dio trabajo como técnico de Gimnasia. Eso lo deja en deuda.
La cronología del terror es muy fuerte: el martes los jugadores fueron amenazados con armas en la concentración, hubo mensajes de voz y de texto en los celulares ("si ganan les damos un tiro en cada pierna") que habrían quedado guardados, les dieron direcciones de sus casas, despreciaron hasta la vida de sus hijos y vieron hinchas fuera de sí cuando se filtró que un jugador de Gimnasia se encontró personalmente con uno de River que le ofrecía 3.000 dólares para cada uno por transformar en un pinche al Boca de La Volpe. Por eso no pareció un accidente el 1-4 en 45 minutos... Aunque no quedan ahí los antecedentes de la barra: hace 15 días se aprobó un balance del club ¡a libro cerrado! y les pegaron a varios integrantes de la oposición ante la vista de todos. La vergüenza golpea a los hinchas "descontaminados", que ahora piensan en movilizarse para no ir a la cancha el domingo contra Vélez.
El guión de esta película verídica se completa con varios jugadores que aún no pueden borrarse la imagen de los más pibes llorando en el vestuario. Aunque ellos hayan colaborado con la barra en otras ocasiones, sienten que esta situación superó todo. Por eso, ayer el único contento en Gimnasia era Muñoz...
Dos directivos participaron de la amenaza al plantel. Franco blanqueó el hecho. Y ya se armó un todos contra todos, en el que muchos jugadores se quieren ir. ¿Muñoz? Feliz.
Yo quiero saber qué piensa Muñoz, el presidente que nos paga por ganar los partidos —preguntó un jugador y miró a los dos dirigentes que estaban al lado de los barras.
—¿A vos qué te parece? Con Boca hay que perder sí o sí —respondió uno de ellos como si fuera obvio.
Los directivos, aunque suene inverosímil, no sólo acompañaron a los hinchas a Estancia Chica. Cara a cara con los jugadores habían bajado la apretada oficial. Mientras los barras mostraban las armas y uno invitaba a pelear a un defensor ("vení afuera que te quemo", amenazó "fierro" en mano), los funcionales Marcelo Leguizamón (secretario) y Mariano Berón (vocal) leyeron la palabra del Diablo. Quizá por eso, mientras el simulacro del partido se jugaba para la TV, Juan José Muñoz estaba en un programa partidario... Ya sabía cómo iba a terminar.
Los jugadores están presos de Muñoz. Y las nuevas órdenes, tras la denuncia de Olé que movilizó a todos los medios, ya no necesitan de mensaje violento. Está implícito. Por eso ayer se reunió para darles su charla técnica para jugarle a la Justicia (fue la única en estos días, porque Pedro Troglio no les dio ni siquiera una indicación táctica a sus jugadores para enfrentar al puntero). Allí, reunido con los más grandes, voceros del plantel, Muñoz pidió bocas cerradas y discurso negador de las amenazas cuando vayan a declarar por la causa que abrió el fiscal Romero.
Aunque antes se había quebrado un testigo: Franco habló por radio para decir que el martes habían tenido visitas. Algo que causó tanta furia en un experimentado del plantel, que hizo averiguaciones periodísticas para saber "por qué habló este boludo". El lateral habría soltado la lengua por temor a quedar marcado como partícipe de un papelón.
El conflicto, en un punto, se transformó en un todos contra todos. Los jugadores estaban divididos sobre qué postura tomar: algunos querían ir al frente, otros no sentían que perdían la dignidad por una derrota deliberada. Todo porque se dañaba el honor del hincha si se ayudaba al Estudiantes del Verón bueno, que hubiera quedado a un punto de Boca. Así y todo, el plantel está enfurecido con el DT que antes abrazaba para festejar los goles: por lo bajo le recriminan que "se encerró en un baño" cuando llegó la pesada a la concentración y también alguno lo acusa de que "fue el que botoneó quién estaba de cada lado". Y mucho más furiosos están con dirigentes que ya parecen barrabravas. Al punto de que se quieren ir varios jugadores —"todos", pareció exagerar una fuente— aunque sólo cinco podrían cumplir su objetivo: Goux (levantó la voz en el apriete y lo sentaron con un "callate porque te mato"), el mismo Franco (hasta el propio técnico lo dejó solo en sus ambiguas declaraciones, ese feo "pregúntenle a Franco"), Teté González, Juan Carlos Olave y Martín Cardetti (él, además, está a préstamo). Hay quienes suman a Cornejo, también a punto de terminar su vínculo, aunque al dueño del 50% de su pase le interesaría seguir teniéndolo cerca... Uno de los pocos que quiere quedarse es el DT, o que no puede irse. ¿Por? "El presidente lo tiene agarrado". Parece que le prestó buena plata cuando a Troglio lo agarró muy fuerte el corralito del 2001 y después le dio trabajo como técnico de Gimnasia. Eso lo deja en deuda.
La cronología del terror es muy fuerte: el martes los jugadores fueron amenazados con armas en la concentración, hubo mensajes de voz y de texto en los celulares ("si ganan les damos un tiro en cada pierna") que habrían quedado guardados, les dieron direcciones de sus casas, despreciaron hasta la vida de sus hijos y vieron hinchas fuera de sí cuando se filtró que un jugador de Gimnasia se encontró personalmente con uno de River que le ofrecía 3.000 dólares para cada uno por transformar en un pinche al Boca de La Volpe. Por eso no pareció un accidente el 1-4 en 45 minutos... Aunque no quedan ahí los antecedentes de la barra: hace 15 días se aprobó un balance del club ¡a libro cerrado! y les pegaron a varios integrantes de la oposición ante la vista de todos. La vergüenza golpea a los hinchas "descontaminados", que ahora piensan en movilizarse para no ir a la cancha el domingo contra Vélez.
El guión de esta película verídica se completa con varios jugadores que aún no pueden borrarse la imagen de los más pibes llorando en el vestuario. Aunque ellos hayan colaborado con la barra en otras ocasiones, sienten que esta situación superó todo. Por eso, ayer el único contento en Gimnasia era Muñoz...
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Fußballer mit Schuss ins Bein bedroht
10. Nov 2006 10:07
Die gewalttätigen Fangruppen der Barrabrava sorgen in Argentinien wieder für Schrecken. Jüngst wurden die Spieler eines Erstligaklubs Opfer einer brutalen Bedrohung durch die eigenen Anhänger.
Der argentinische Fußball wird von einem weiteren Skandal um gewalttätige Fangruppen erschüttert. Spieler des Erstligaklubs Gimnasia seien von eigenen Fans mit einem «Schuss in jedes Bein» bedroht worden, falls sie ein wichtiges Spiel gegen Boca Juniors gewinnen sollten, berichtete «Olé», die größte Sportzeitung des Landes, am Donnerstag. «Gegen Boca müsst ihr auf jeden Fall verlieren», hätten etwa 20 der gut organisierten und besonders aggressiven Fans in den Umkleideräumen der Spieler befohlen. Das Spiel am Mittwochabend war prompt mit einem 4:1 Erfolg Bocas zu Ende gegangen.
Maradona ruft Politiker an
Grund der ungewöhnlichen Drohung der so genannten Barrabrava gegen die eigenen Spieler war laut «Olé», dass eine Niederlage Bocas dem Erzfeind von Gimnasia, dem Klub Estudiantes, gute Chancen auf den Titelgewinn verschafft hätte. Der frühere Fußballstar Diego Maradona forderte, «irgendjemand muss etwas unternehmen oder der Staat eingreifen». Die Staatsanwaltschaft lud die Spieler von Gimnasia vor, um sie zu den Vorgängen zu befragen. Das Parlament der Provinz Buenos Aires verabschiedete unterdessen ein Gesetz, das den Barrabravas den Zugang zu den Stadien verbietet.
In den Barrabravas sind die besonders treuen und gewaltbereiten Fans organisiert, die beste Verbindungen zu den Vereinsführungen haben. Zugleich aber sind sie nach Angaben von Kennern des Fußballs bei fast allen Vereinen das Zentrum einer mafiösen Verbindung zur Polizei. Zudem werden sie auch von Politikern für Straßenschlachten angeheuert. In den Stadien zetteln sie immer wieder brutale Schlägereien mit gegnerischen Fans und mit der Polizei an. (nz)
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Es hilft nicht immer Recht zu haben.
Johann Wolfgang von Goethe
Es ist schon alles gesagt worden, aber noch nicht von allen.
Karl Valentin
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